Cuando Waring Hudsucker, presidente de la exitosa y gran empresa "Industrias Hudsucker", se suicida, su junta directiva encabezada por Sidney Mussberger (Paul Newman), idea un brillante plan para conseguir un montón de dinero: poner a un tonto al frente de la compañía. Cuando las acciones estén lo suficiente bajas, Sidney y sus colegas podrán comprarlas baratas, hacerse con la compañía y restaurar sus fortunas. Para llevar a cabo su plan escogen al idealista Norville Barnes (Tim Robbins), que acaba de comenzar en el departamento de correo. Norville es lo suficientemente inocente y torpe como para llevar a cualquier empresa a la ruina pero, pronto, la reportera Amy Archer (Jennifer Jason Leigh) huele algo raro y comienza una investigacón encubierta de la empresa.
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